Competir en la era de los supermercados centrados en el cliente

Para que las tiendas de comestibles sigan siendo competitivas hoy en día, se requiere una agilidad incesante. Durante años, la atención se centró en hacer que las tiendas fueran visualmente atractivas, luego, de la noche a la mañana, en la primavera de 2020, eso cambió: proporcionar una experiencia en línea fluida de repente se hizo indispensable. Ahora, los minoristas compiten para encontrar formas innovadoras de fusionar las experiencias en línea y en persona en nuevas formas de compras sin interrupciones, al mismo tiempo que cumplen con las crecientes expectativas de los clientes. A medida que se desmoronan las barreras geográficas, las tiendas de comestibles ahora compiten con cadenas, tiendas especializadas, agricultores locales y mercados en una escala nunca antes vista. Los clientes conectados de hoy tienen más opciones de comestibles que nunca, y lo saben.

La buena noticia para los tenderos es que la demanda no va a desaparecer pronto. Las personas aún aprecian el acceso a una variedad de alimentos y artículos básicos para el hogar frescos, saludables, seguros y de origen sostenible. Pero, lo que vemos ahora es cómo han cambiado las reglas del juego:

El 40% de los compradores actuales de comestibles en línea planean continuar comprando todos sus comestibles y artículos esenciales para el hogar en canales digitales.
La elección importa cada vez más, con formas de comprar comestibles y artículos para el hogar que abarcan en línea, suscripciones, aplicaciones de entrega, mercados y ventas directas al consumidor.
Los clientes están menos interesados en aceptar sustituciones de productos agotados.
Los clientes son sensibles al precio: el 56% de los consumidores son más conscientes de los costos en 2021, y el 26 % desea ahorrar dinero y experimentar una mejor calidad.

¿Cómo están ganando los tenderos la agilidad para competir en esta nueva era? Poniendo lo digital en el centro de sus operaciones. Nuestro punto de vista, “Digital Core for Grocery”, explora los avances que son posibles con la agilidad añadida de un núcleo digital. Desde proporcionar una resiliencia sin precedentes en las redes de suministro hasta ayudar a los minoristas a reinventar las experiencias de compra centradas en el cliente, lo digital está cambiando la cara de los supermercados.