Creemos que ahora es precisamente el momento idóneo para que el sector de las ciencias de la vida replantee el propósito de sus estrategias tecnológicas. Es el momento de impulsar una nueva visión ambiciosa para encontrar nuevas formas de acelerar la atención centrada en el paciente. Una aspiración impulsada por la innovación, las personas, la cultura y una madurez tecnológica que garantiza la fiabilidad y la previsibilidad de los resultados, desde el núcleo digital hasta los sistemas periféricos. De esta manera, se eliminan las antiguas frustraciones y limitaciones, se fortalece la capacidad de la organización para gestionar los cambios y se le permite prepararse mejor para un futuro sostenible, tanto para el sector de las ciencias de la vida como para el medio ambiente.