Optimizar la operación de las aplicaciones, una promesa de valor realista para las empresas

Sin embargo, hoy en día, implementar esta operación de forma eficiente ya es posible y lograrlo ofrece una promesa tentadora para todo negocio: liberar recursos para invertir tiempo y esfuerzo en proyectos estratégicos para incrementar la competitividad.

Si bien es cierto que las aplicaciones continúan siendo el núcleo central del negocio de toda empresa, también es una realidad que su mantenimiento requiere demasiada atención en TI y queda muy poco margen productivo para realizar nuevos proyectos o, incluso, pensar en migrar a soluciones más funcionales e integrales.

El problema es que, de acuerdo con el informe conjunto de Capgemini y Everest Group[1], Applications Transformation for the Digital Age, los modelos tradicionales de servicios de aplicaciones son incapaces de generar valor comercial debido, principalmente, a que son sistemas heredados e inflexibles, su velocidad de entrega es lenta e ineficiente en cuanto al ahorro de costos y, por si fuera poco, sus capacidades son limitadas para apoyar en procesos de innovación.

Aspectos que pudieran parecer desalentadores y que generan incredulidad ante la decisión de optimizar los procesos. Pero no todo está perdido. Para conseguir una correcta evolución de los servicios de aplicaciones, la clave está en delegar la operación de las aplicaciones a un consultor experto que se encargue del mantenimiento y soporte de los sistemas, brindándole a la empresa la posibilidad de enfocarse en cumplir sus objetivos comerciales.

Para la elección de ese aliado conviene evaluar no sólo su experiencia en el área, sino también su propuesta en cuanto a herramientas, metodológicas y procesos diferenciados. Una combinación potente de sus capacidades asegurara el éxito del negocio.

Las soluciones, adicionales a la operación, administración, mejora y análisis de aplicaciones[2],  también se enfocan en identificar incidentes y atender las solicitudes, prevenir errores y optimizar el rendimiento, construir plataformas de colaboración para compartir buenas prácticas, adoptar tecnologías de automatización e inteligencia artificial, ejecutar diagnósticos de manera asertiva y detectar oportunidades de mejora en los sistemas.

En síntesis, la optimización en la operación de aplicaciones ya es una realidad para empresas con necesidad de mantener sus sistemas con el mismo o menor presupuesto, así como lograr un ahorro de recursos. Así, podrán dedicar más tiempo a proyectos de innovación y gestión empresarial, útil para compañías con deseos de ser más competitivas en el mercado globalizado.

Para lograrlo, la clave está en encontrar al aliado o consultor ideal que cuente con un amplio portafolio de servicios, basado en una correcta metodología y herramientas, acorde a las necesidades de cada empresa, y además tenga las capacidades para complementar la parte tecnológica con el valor agregado que ofrecen las personas al negocio.

Capgemini México, empresa líder global en consultoría, servicios de tecnología, y transformación digital, Capgemini está a la cabeza de la innovación para enfrentar las oportunidades de sus clientes en el cambiante mundo de la nube, digital y plataformas.

[1] Extrayendo el máximo valor empresarial de la Transformación de Aplicaciones, URL: https://www.capgemini.com/ar-es/resources/extrayendo-el-maximo-valor-empresarial-de-la-transformacion-de-aplicaciones/

[2] ADMnext