Saltar al contenido

Liderazgo con inteligencia emocional, necesario para el trabajo remoto

Capgemini
2020-06-05

El trabajo remoto es una práctica muy útil que brinda beneficios tanto a empleados como empleadores, por lo que se ha puesto en marcha -en mayor o menor medida- por muchas empresas en los últimos años.

Con la cuarentena impuesta a causa de la pandemia de COVID-19, se incrementó el número de personas que trabajan a distancia, lo cual requiere que las organizaciones implementen no sólo herramientas tecnológicas sino también nuevas habilidades de liderazgo, que integren un alto nivel de inteligencia emocional (IE).

La modalidad de trabajo virtual ha cobrado mayor relevancia y popularidad en los últimos años debido a los beneficios que conlleva para la fuerza laboral y, por consiguiente, para las organizaciones. De acuerdo con investigaciones internacionales, los trabajadores que laboran a distancia demuestran mayores índices de productividad, satisfacción, tranquilidad y felicidad. Por ejemplo, un estudio realizado por la agencia china Ctrip reveló que el rendimiento de sus trabajadores de centros de llamadas remotos aumentó 13% y las tasas de desgaste disminuyeron 50%[1]. No por nada, mucho se habla de plataformas para mantener dinámicas en equipo y consejos prácticos para que los empleados mantengan rutinas de trabajo saludables.

Durante la contingencia sanitaria por COVID-19, el trabajo virtual también se ha convertido en un factor esencial para mantener la continuidad de muchos negocios. Pero también, puso en evidencia la necesidad de un liderazgo con IE que logre empatizar con los empleados acorde a cada situación, ya que en momentos de crisis es común que las personas experimenten incertidumbre, nerviosismo y miedo, por lo que necesitan mantener conexiones emocionales en todos los ámbitos de su vida, incluyendo el trabajo.

Un problema que puede generar el trabajo remoto es la falta de colaboración, pues de acuerdo con un estudio de Capgemini sobre cultura digital, mientras 85% de los altos ejecutivos creen que en su organización colaboran eficazmente todas las unidades de negocio, sólo 41% de los empleados opina igual[2]. De ahí la importancia de definir objetivos de negocio de forma colectiva, para que todos los equipos se involucren y participen en el proceso.

Otro reto que tienen que enfrentar los empleadores es asegurar que su fuerza de trabajo se mantenga motivada y comprometida, aún sin una supervisión física y canales de comunicación tradicionales, así como fomentar la colaboración y creatividad de manera virtual. Además, se requieren mantener las conexiones sociales con los empleados a favor de contribuir al bienestar emocional de las personas, quienes corren el riesgo de sentirse aisladas ante la pérdida de interacciones reales con sus compañeros en la oficina.

Por ello, hoy más que nunca, es imprescindible contar con un liderazgo efectivo en un entorno virtual, en dónde los gerentes y altos mandos desarrollen habilidades con un alto grado de IE para brindar una mayor autonomía a sus empleados, permitiéndoles realizar su trabajo y cumplir sus objetivos sin un control estricto, mientras que ellos pueden enfocarse en sus clientes u otras responsabilidades acorde a su cargo.

Asimismo, es primordial que los líderes sean capaces de comunicarse de manera empática y auténtica con sus colaboradores, fomentando así un sentimiento de pertenencia entre todos los miembros del equipo, así como una mayor lealtad a la compañía. Al respecto, un estudio de Capgemini[3] alerta sobre la necesidad de que las empresas integren la IE en su cultura organizacional, ya que se estima que sólo 42% de las organizaciones brindan capacitación de IE para sus líderes y personal de alta gerencia, cifra que disminuye a 32% en el caso de personas con puestos de gerencia media y desciende al 17% para el resto de los empleados sin funciones de supervisión.

En conclusión, el primer paso para toda organización es comprender que el trabajo virtual va más allá de modificar el esquema físico de la operación, pues implica un profundo cambio en la mentalidad, cultura y comportamiento de líderes y empleados. La modalidad del trabajo remoto llegó para quedarse, por ello, las empresas tienen la responsabilidad de adecuarse a las necesidades de su fuerza laboral para mantener a los empleados felices y productivos, no sólo durante la contingencia, sino a largo plazo.

Ramón Álvarez  es Vice Presidente de Capgemini México y LATAM , empresa líder global en consultoría, servicios de tecnología, y transformación digital, Capgemini está a la cabeza de la innovación para enfrentar las oportunidades de sus clientes en el cambiante mundo de la nube, digital y plataformas.

[1] Virtual organizations need real leadership, 2020, URL: https://www.capgemini.com/research/virtual-organizations-need-real-leadership/

[2] The Digital Culture Challenge: Closing the Employee-Leadership Gap, 2017, URL: https://www.capgemini.com/consulting/wp-content/uploads/sites/30/2017/07/dti_digitalculture_report.pdf

[3] Emotional Intelligence. The essential skillset for the age of AI, 2019, URL: https://www.capgemini.com/research/emotional-intelligence/