Cambio de marcha

Refugio en movimiento: cómo los consumidores ven el automóvil como un espacio seguro

A medida que la pandemia de COVID-19 proyecta su larga sombra sobre otro año y el mundo espera vacunas a gran escala y se prepara para futuros rebrotes y nuevas mutaciones del coronavirus, los hábitos y preferencias de los consumidores formados al comienzo de la pandemia están en camino. Es por eso por lo que el Instituto de Investigación de Capgemini continúa con su serie de notas de investigación con orientación pragmática sobre cómo las organizaciones pueden sobrevivir y prosperar en la nueva normalidad.

En abril de 2020, informamos sobre cómo la pandemia estaba cambiando el comportamiento de compra de los clientes automotrices hacia una preferencia por vehículos personales, características de salud e higiene en los automóviles y modos digitales de interacción. Sin un final claro a la vista para la crisis de salud y a pesar de que las ventas de automóviles nuevos aún no se han recuperado a sus niveles previos a la pandemia, parece poco probable que disminuyan las preocupaciones sobre la movilidad pública y compartida. Es por eso por lo que, en noviembre de 2020, para nuestra nota de investigación más reciente: Cambio de marcha: COVID-19 y el consumidor automotriz que cambia rápidamente, encuestamos a 11,000 consumidores de 11 países para examinar los efectos a largo plazo de la pandemia y las tendencias y oportunidades emergentes en la industria automotriz.

Descubrimos que a medida que los consumidores se preparan para la nueva normalidad posterior a la pandemia y continúan evitando el transporte público o compartido, exigen más funciones de salud y bienestar y una experiencia de compra impulsada digitalmente. De hecho, el interés en comprar un automóvil nuevo aumentó del 35 % en abril al 46 % en noviembre de 2020. Además, aunque las preocupaciones económicas están atenuando las expectativas con respecto al tipo de modelo de vehículo, una proporción considerable (21 %) de los posibles compradores está dispuesta a pagar por una experiencia más atractiva. Es hacia ellos y hacia otros grupos objetivo que las empresas automotrices deberían orientar productos, características y mensajes renovados. La crisis de COVID puede haber causado estragos a corto plazo en la industria, pero también ha acelerado ciertas tendencias críticas a largo plazo (digitalización, electrificación y automóviles conectados) que se producirán una vez que finalmente termine.

Mientras navegamos juntos por esta crisis sin precedentes, esperamos que estas notas de investigación ofrezcan una visión convincente de la nueva normalidad en un mundo posterior a COVID. Para obtener más información sobre las tendencias y oportunidades emergentes en la industria automotriz, descarga el informe.