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La innovación llega a la Dirección Financiera

18 jun. 2010

La Dirección Financiera se enfrenta a una intensa transformación que pasa por una mayor implicación en la gestión diaria de la compañía, y que tiene como objetivo fundamental mantener y mejorar la rentabilidad del negocio. Históricamente, el papel del director financiero se ha limitado a la ejecución y gestión de las transacciones diarias para realizar el reporting a la alta dirección, a los accionistas, al regulador y a los auditores. De esta forma, el director financiero organiza y automatiza estas operaciones para posteriormente crear un modelo más avanzado de control, análisis y apoyo a la toma de decisiones.

Para poder llevar a cabo esta transformación y estar preparados para futuros cambios, el director financiero debe transformar su labor. Los objetivos de su nueva función serían:

  • Realizar el presupuesto operativo anual de manera descentralizada basado en parámetros flexibles y alineados con los objetivos estratégicos de la compañía.
  • Controlar el desempeño del negocio contra el presupuesto y analizar la rentabilidad para asegurar la consecución de los objetivos estratégicos:
  • Controlar gastos e inversiones no esenciales.
  • Conocer el margen de rentabilidad de productos, canales de distribución y clientes.
  • Optimizar el uso de activos y capacidad de recursos.
  • Integrar al resto de la organización en dichos procesos de cara a apoyar y mejorar la toma de decisiones de negocio basadas en el control de costes y el análisis de la rentabilidad.

El presupuesto, una ventaja competitiva

La realización del presupuesto es un reto para la mayoría de las compañías aseguradoras. Generalmente, se considera un proceso molesto y que consume mucho tiempo. Por el contrario, hacer un cálculo de forma óptima contribuye de manera crucial a los resultados de la compañía. Las compañías que consiguen integrar el seguimiento presupuestario en sus organizaciones no sólo consiguen un presupuesto más fiel y una mejora en la toma de decisiones, también inculcan en toda la organización una disciplina de control financiero que se convierte en una verdadera ventaja competitiva.

Medición del desempeño y análisis de la rentabilidad

La administración del desempeño y la rentabilidad del negocio son procesos cíclicos que integran a los componentes estratégicos con los componentes operativos a través de métodos que analizan las causas y efectos del comportamiento de la organización para generar una rentabilidad adecuada. El control del desempeño y el análisis de la rentabilidad se realizan cruzando los datos económicos del plan estratégico con los resultados y el control operativo diario. Se realizan una serie de controles de tiempo, coste y calidad que permiten evaluar la ejecución interna (eficiencia) y resultados (efectividad) de los procesos que integran a la cadena de valor de la aseguradora.

Integración al resto de la organización

La estrategia adecuada para mantener e incrementar la rentabilidad debe ser compartida por toda la organización. De este modo, todas las áreas del negocio deberían reportar a un mismo equipo de la nueva Dirección Financiera, que debería generar e interpretar información de manera compartida para lograr acciones específicas que permitan mejorar la rentabilidad y aportar valor al negocio.